Chevron, “Premio Pinocho 2015” por trampas al cambio climático mundial
Es la misma petrolera estadounidense que se niega a reformular las tarifas del gas para industriales de la Costa Caribe colombiana.
La petrolera estadounidense Chevron Corporation fue distinguida con el “Premio Pinocho 2015”, en reconocimiento a sus políticas contra el cambio climático a nivel mundial.
La indecorosa distinción le fue otorgada por la organización Amigos de la Tierra (Friends of the Earth), que cuenta con más de 2 millones de miembros y seguidores en todo el mundo y que promueve campañas sobre los problemas ambientales y sociales más agobiantes.
“Combatimos el actual modelo de globalización económica y corporativa, y promovemos soluciones que ayudarán a crear sociedades ambientalmente sustentables y socialmente justas”, reza el objetivo de la organización.
Chevron resultó galardonada en la categoría "Lobbying", que se entrega a la empresa que ha hecho los mayores acciones de cabildeo para socavar el clima, de acuerdo con lo reportado por el portal LeMonde.fr.
Para los Amigos de la Tierra, Chevron lleva a cabo una política de "agresivo lobby" pro-gas en Argentina, sobre todo en la Patagonia.
Según Pascoe Sabido, investigador y activista de Corporate Europe Observatory "hazañas de energía sucia de Chevron no serían posibles sin su íntima relación con los mismos gobiernos que se supone que regularán sus actividades”.
El análisis de las actividades de Chevron, por parte de los Amigos de la Tierra, indica que “en Argentina, Chevron ha utilizado el cabildeo, las conexiones políticas y tácticas intolerables para empujar su agenda fracking y proteger sus intereses en su único proyecto de explotación no convencional fuera de América del Norte. Deseoso de ampliar su gas de operaciones petroleras fuera de América del Norte, el gigante petrolero Chevron ha estado trabajando duro para convencer a los gobiernos de Europa y de América del Sur para darle rienda suelta a fracking. Pero fracking se ha vinculado a la contaminación de las aguas subterráneas, los impactos graves de salud, la inestabilidad sísmica, y el aumento de las fugas de metano que conducen a las emisiones de carbono significativamente más altos en general que otros combustibles fósiles, incluyendo el carbón”.
En Europa del Este, “Chevron fue capaz de hacer un llamamiento a Hillary Clinton y la cadena estadounidense de embajadas extranjeras, hasta la presión política interna para el empuje del fracking al más alto nivel. En Bulgaria, donde Chevron había firmado un acuerdo de US$68 millones para las concesiones, antes de la protesta pública llevó a una prohibición. Hillary Clinton voló a convencer a los políticos locales para revocar la misma. Según un diplomático búlgaro, ella se ofreció a enviar a los mejores especialistas para presentar "los beneficios para el pueblo búlgaro." No funcionó con la oposición y se extienden a Rumania. Así que el enviado especial para la energía en Eurasia, Richard Morningstar, fue llamado para hacer retroceder. Lobby privado y reclamos públicos masivos vieron las prohibiciones en ambos países. Sin embargo, incluso con los EE.UU. detrás de ello, los resultados de resistencia y decepcionantes locales han visto desde que Chevron abandonar todas las operaciones de Europa del Este (Polonia, Rumania, Bulgaria y Ucrania) aunque todavía está cabildeando activamente contra la regulación fracking a nivel de la UE”.
En Argentina, sin embargo, “Chevron ha encontrado un terreno mucho más maleable por su fracking. Es un socio clave de los esfuerzos incansables de la empresa controlada por el Estado y de YPF para desarrollar petróleo no convencional y gas en la Patagonia a cualquier precio”.
En paralelo, Chevron pidió al gobierno argentino para una serie de cambios en las políticas que estaban en total contradicción con las leyes existentes y que presenta como condiciones para invertir en el país. “Después de meses de cabildeo agresivo, estas demandas fueron finalmente admitidas a través de un decreto presidencial, apodado el "decreto de Chevron", ya que estaba hecha a la medida de Chevron, y el acuerdo con YPF se firmó justo el día después de su publicación”, señala el análisis de Amigos de la Tierra.
El decreto entre otras políticas incluyó un precio garantizado superior para el gas y los combustibles, las subvenciones públicas para la infraestructura, un régimen fiscal más favorable y concesiones más largas, entre otros.
“Chevron también exigió la introducción de un mecanismo de solución de diferencias de negocios (en la Cámara Internacional con sede en París), similar a los mecanismos incluidos en muchos tratados de libre comercio con el fin de protegerse contra cualquier intento de cambiar este marco político. En la provincia de Neuquén, también se introdujeron cambios legislativos para servir a los intereses de las compañías petroleras, como la supresión de las consultas públicas y el debilitamiento de los controles ambientales”.
La obtención de estas condiciones favorables para sus operaciones en Argentina no fue suficiente para Chevron, “también quería la impunidad de su devastación ambiental que ha causado en otros lugares. En 2013, había sido condenado a una multa de miles de millones por la corte ecuatoriana superior por su legado tóxico de la contaminación por petróleo en la región amazónica del país. Las partes ecuatorianas habían recurrido a los tribunales argentinos a tener activos congelados de Chevron en el país, a fin de garantizar la ejecución de la sentencia, y habían ganado en primera y segunda instancia. Cuando el caso llegó a la Corte Suprema en Buenos Aires, sin embargo, Chevron amenazó con renunciar a sus inversiones previstas en los desarrollos de petróleo y gas en Argentina, que, según dijo, ascendería a varios miles de millones de dólares”.
En efecto, el vicepresidente de Chevron dijo que "el acuerdo no podía seguir adelante, siempre que (la congelación de activos) quede pendiente". Incluso “el CEO de YPF pesó, condenando a la demanda ecuatoriana y su "efecto negativo en el empleo y la inversión en el país" y también lo hizo la Fiscalía General de la Nación. La Corte Suprema argentina finalmente falló a favor de Chevron. Unas semanas más tarde, el Presidente y CEO de Chevron John Watson, el CEO de YPF y la Presidenta de Argentina Cristina Kirchner finalmente firmaron el acuerdo para el desarrollo de su proyecto”.
Chevron es la misma petrolera que, haciéndole “conejo” a la Costa Caribe, se ha negado a reformular las tarifas del gas para la industria regional, desatendiendo las decisiones de la CREG, los Ministerios de Hacienda y Minas y las mismas directrices del Presidente Juan Manuel Santos.
Con su negativa, los aparentes beneficios que tendría la industria regional no serán posible teniendo en cuenta que el martes 15 de diciembre vence el plazo para la radicación de los nuevos contratos, hecho al cual se niega rotundamente Chevron a realizar, por ejemplo, con Gases del Caribe.
Además de Chevron, los “Premios Pinocho 2015” fueron entregados a EDF y BNP Paribas, por circunstancias similares.
Los Premios Pinocho climáticos llaman a los gobiernos a tomar medidas concretas para poner fin a la impunidad corporativa a través de la regulación de unión. “Los gobiernos deben ignorar las falsas soluciones corporativas, y dar prioridad a la protección de los derechos humanos, el medio ambiente y el clima, según las organizaciones”, sostienen los Amigos de la Tierra.